Cat Street puede parecer una obra menor, extraña, pero fue en su momento una obra esperada y muy importante solo por lo que suponía: el regreso de Yoko Kamio tras finalizar su obra más importante y famosa: "Hana Yori Dango".
En el estilo de dibujo se nota la evolución que ha sufrido Kamio desde que empezó su carrera, mucho más cuidado, así como la historia, pues aunque siga estando protagonizado por adolescentes, toca temas más maduros y arriesgados.
Y es que, para su regreso, Kamio no escogió la vía fácil y cambió totalmente de registro: si en Hana Yori Dango la mayoría de los protagonistas pertenecían a la clase privilegiada y aparentemente no tenían ningún problema, en Cat Street los protagonistas son unos auténticos "niños perdidos" o, como se califican a sí mismos, unos "gatos callejeros".
Pero va aun más lejos y, la protagonista principal es lo que se denomina una hikikomori (una persona, normalmente adolescente, que vive prácticamente sin salir de su habitación y sin comunicarse con el mundo exterior, y si lo hace, será a través de Internet). Si a nosotros un personaje así no nos despierta de inicio más que una ligera simpatía y curiosidad por saber qué le ha podido llevar a ese estado, para entender el valor que tuvo la autora para elegirla como protagonista debemos saber que en Japón tener a un hijo así es una auténtica vergüenza, algo de lo que no se habla, y por tanto es bastante difícil que se les busque ayuda, por lo que la reacción de los padres y hermana de Keito es bastante realista, aunque sorprende que a ella la pase de tan pequeña.
Luego está Momiji. Seguro que alguna vez habréis visto imágenes de convenciones otakus donde se hace cosplay y se disfrazan de personajes de mangas o animes. Esto está más o menos bien visto dentro de ese círculo, pero nadie se disfraza fuera de las convenciones. Por eso debéis entender que el movimiento "Lolita" no es un disfraz, sino un estilo de vida. Una tribu urbana (con sus subtribus) que se viste así normalmente, y eso, en un país como Japón, no está bien visto.
Rei y Kôichi también son diferentes a su manera y por eso también se han visto apartados de la sociedad: Kôichi por propia voluntad, ya que se ve diferente y cree que la sociedad no es capaz de darle algo que quiera o necesite, por lo que trata de que al menos, esa sociedad que no sabe que hacer con los diferentes, no le haga daño. Rei por el contrario es apartado por ser demasiado individualista, y es al estar solo que es capaz de reconectar con la gente, pero (al haber aprendido a estar solo) lo hará en sus propios términos.
Todos ellos se encuentran en un lugar especial. Una especie de oasis para los diferentes, donde pueden ser ellos mismos y al mismo tiempo decidir qué hacer con su vida en los huecos que la sociedad les deje o que ellos mismos encuentren o se hagan. La familia es un pequeño reflejo de esa sociedad que no sabe que hacer con ellos, y cuando encuentran ese lugar donde encajar, respiran aliviados y son felices por ellos.
Pero al final ves que solo entre los diferentes, en su propio pequeño mundo hecho a su medida, es donde son verdaderamente felices. Y te das cuenta que la vida, seas quién seas y seas cómo seas, al final siempre es igual para todos y a todos nos hacen felices las mismas cosas.
Así, este es un manga que recomendaría a aquellos que quieran leer una buena historia, madura y llena de esperanza. Si lo que os echa para atrás es que hay que leer "a la japonesa" (de atrás adelante y de derecha a izquierda), os aseguro, para los que nunca lo habéis hecho, que no es nada difícil. Quizás en el primer tomo os cueste arrancar, pero después de un rato os habréis acostumbrado, os olvidareis de ello, y simplemente disfrutareis de la lectura y los dibujos.
Y si los mangas no son lo vuestro, pero queréis darle una oportunidad a una serie asiática, en Japón se hizo en el año 2008 una adaptación con el mismo título que solo dura 6 capítulos de 40 minutos y ha sido fansubbeada al español. La historia varía muy ligeramente del manga, principalmente para reducir personajes y algunos de los conflictos, respetando los sucesos más significativos de la obra, a excepción de todo lo que tenga que ver con Rei, ya que este personaje cambia completamente, hasta el punto que se llama Gouta y su problema es que es tartamudo y algunos de sus antecedentes se los dan a Kôichi. Además, se destaca la relación familar de Keito antes y después del incidente, sus dificultades para volver a interactuar con la gente y como poco a poco vuelve a abrirse al mundo.
Personalmente, creo que la serie es una muy buena adaptación del manga, los cambios son adecuados y te emocionas con la historia en muchos momentos. Así que también la recomiendo junto con el manga.
Resumen de los Tomos de Cat Street [1],
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[3],
[4],
[5],
[6],
[7] y
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