Conociendo a los autores: Pedro Santamaría

Hace poco os comentaba lo mucho que me sorprendía y alegraba descubrir que este año eran varios los libros que se localizaban en Cantabria. En un caso porque la autora consideraba que era algo que pedía la historia, pero en el otro porque la autora tenía raíces cántabras. Hoy os voy a hablar de un nuevo libro (en realidad 2) cuyo autor conocí gracias a Facebook: Pedro Santamaría.

Ya sabeis que desde hace unos meses tengo una cuenta en Facebook como medio para estar un poco mejor informada de novedades y actualizaciones varias. Confieso que no estoy muy puesta y no le saco todo el partido posible, así que no soy de las que busca amigos o conocidos de forma habitual, aunque alguno he ido encontrando por el camino. Pero poco a poco la gente también me va encontrando a mi y, al ser de la misma ciudad, Pedro Santamaría fue una de esas personas.

Foto sacada del Facebook de Pedro Santamaría

Para los que no lo conozcan aún, Pedro Santamaría es un autor de novela histórica, centrado hasta ahora en los periodos II y III a.C y en los espartanos.

Así, su primera novela, "Okela", plantea la teoría (basada en una cita de "Geográfica" de Estrabón) de que un grupo de espartanos buscaron nuevas tierras y se establecieron en Cantabria, mientras que la segunda, "El águila y la lambda", cuenta las circunstancias que rodearon a los generales Jantipo y Marco Atilio Régulo antes de enfrentarse en la batalla de Bagradas durante la Primera Guerra Púnica.

Yo, como amante de los finales felices que soy, aunque me parecían libros interesantes (sobre todo el de "Okela", que me atraía y chocaba a partes iguales), no los tenía en mi lista de pendientes porque no me fiaba un pelo de su final: los espartanos y los cántabros fueron famosos por preferir la muerte a la derrota y en una batalla siempre mueren muchos (aunque no voy a avisaros quién ganó ésta por si no lo recordáis).
Pero la cosa cambió cuando conocí al autor y empecé a charlar con él. Primero por Facebook, pero finalmente en persona.

Envidio muchísimo a la gente que tiene la oportunidad de ir a presentaciones habitualmente. Las pocas a las que he ido me han dejado encantada, ya que los autores me han transmitido esa pasión que sienten por sus obras y salgo de ellas queriendo compartirla con ellos. Y eso mismo me pasó con Pedro, aunque en este caso fue en un encuentro personal.

Al ser ambos de Santander, quedamos en una cafetería para charlar de sus libros y, durante algo más de una hora, nos presentamos (sobre todo yo, que no tengo ninguna foto colgada en la red), y hablamos de lo divino (mitología) y de lo humano (nuestras vidas). Pero además, por supuesto, me contó como nacieron sus novelas, su conocimiento de las obras clásicas en las que se basó para sacar mucha de la información que le sirvió para formar a sus personajes, y la aventura que aun es para él el "oficio" de escritor.


Y de nuevo sentí esa pasión que parecen compartir los escritores cuando hablan de sus obras. Y quizás es porque somos de una zona que está fuera de los círculos habituales de presentaciones importantes (aunque parece que cada vez se organizan más), y él mismo no parece haber hecho demasiadas actividades promocionales, así que la única forma con la que tiene contacto con sus lectores es a través de su Facebook (aunque espera tener pronto una web), pero me transmitió esa humildad (y sentimiento de responsabilidad) de quien quiere alcanzar a alguien con sus escritos y aun se sorprende cuando alguno de sus lectores, no solo le responde, sino que lo hace con entusiasmo.

Además, me regaló sus libros. "Okela" fue una sorpresa, ya que sólo me avisó sobre "El águila y la lambda", y yo pensaba coger en la biblioteca pública "Okela". Pero Pedro es de esos lectores que le gusta tener todos los libros que lee en su biblioteca y adora el libro como objeto, así que decidió regalarme sus dos novelas, y después de nuestra larga charla me las dedicó. Por último, antes de despedirnos, me comentó que tiene una nueva idea en la cabeza en la que está trabajando ahora mismo, pero sólo me adelantó que esta vez transcurrirá en la Hispania del siglo VI.

Lo gracioso fue cuando por la noche, de repente, caí en la cuenta de que no se me había ocurrido sacar una foto de nuestro encuentro, ¡yo que siempre llevo la cámara encima y más de una vez me he parado a sacar fotos a flores! Está claro que lo mio no es ser paparazzi, ya que cuando más sentido tiene sacar la cámara de fotos, nunca se me ocurre. Pero Pedro, muy amablemente, me dio permiso para cogerle una de su cuenta de Facebook, así que le cogí la que veis arriba (quitando a la chica que le acompañaba, lo siento, pero podéis ver la original aquí), porque me recordaba cuando trataba de escribir mis dedicatorias y yo no hacía más que hablarle... ¿O creíais que lo de "gran conversadora" era por decir?

Ahora, lo que estoy deseando es que acabe el año para poder sentarme tranquilamente a leer los libros.

¿Conocíais a Pedro Santamaría y sus obras? ¿Qué os ha parecido nuestro encuentro? 

Este post ha sido redactado según el Código de Confianza C4C.