Las aventuras de Sookie llegan a su fin

Confieso que, durante una buena temporada, fui fiel lectora de Sookie Stackhouse en su versión papel. Es una confesión difícil, porque analizando los libros fríamente, no son nada del otro mundo. Nunca ganarán un gran premio literario. Pero, consiguen meterte en la historia y arrastraste a ella y, sinceramente, muchas veces eso es todo lo que le pides a un libro: que te entretenga, te saque de tu rutina y te lleve a otro lugar.

Confieso también que, cuanto empecé a saber de esta saga, solo había un libro publicado en español (el primero) y no era precisamente fácil de encontrar. Yo tuve suerte, lo encontré en mi biblioteca y, habiendo leído tan buenas críticas en foros en inglés, no pude resistirme a cogerlo, aunque su sinopsis y portada por si solas no me provocaran ningún interés.

¡Pero como me enganchó! Fue poco a poco, casi sin darme cuenta. Pero cuando llegué a la última página de ese primer libro, necesitaba leer los siguientes con desesperación.

No sé cuanto me duró el enganche. Devoraba los libros según me hacía con ellos y esperaba los siguientes con impaciencia. Hasta que dejó de emocionarme la espera.

Fue después cuando apareció la serie. Y otra vez no tenía muchas ganas de verla. Si era como los libros, tampoco sería para tanto. Quizás hasta cutre. Pero en cuanto vi el primer episodio me dí cuenta de que habían captado precisamente la razón por la que me engancharon los libros: esa cutrez que raya la parodia y se ríe de si misma. No trataban de ser otra cosa que lo que eran, y también entendí porque la serie se llamaba "The Southern Vampires" (aunque ahora parece que se llama "The Southern Vampire Mysteries") y no "Las aventuras de Sookie Stackhouse" o algo similar (aunque también se conocen así). Es porque va de unos vampiros concretos (aunque también aparezcan otros series fantásticos), de una zona concreta, y que por tanto, se comportarán de una forma acorde con el sitio en el que suceden los hechos que se nos cuentan. No son personas elegantes. Son vampiros y se mueven entre gente sencilla, con prejuicios y, en muchos casos, auténticos paletos. Sookie la primera.

Y ese es su encanto. Y aunque la serie de televisión lo ha exagerado, ¡me encanta aun más precisamente por ello! Como adaptación, quizás deje un tanto que desear, ya que, aunque coge cada temporada la idea principal del libro correspondiente, ha creado nuevos personajes, resaltado otros y alterado las relaciones y el orden de los sucesos. Esto ha provocado que, temporada a temporada, la serie de televisión se aleje un poquito más de los libros y se convierta en una suerte de universo alternativo al que aun no me he cansado de visitar.

Pero todo lo bueno (o, al menos, entretenido) llega a su fin, y la señora Charlaine Harris, la cabeza pensante de la que nacen todas estas historias, acaba de anunciar que su novela nº 13 será la que ponga fin a la serie, aunque en su web oficial no se confirma aun este dato (fuente: Good Choise Reading).

¿Será esta vez verdad? A los seguidores de la serie de televisión, no nos afecta (o al menos, aun no) y siempre nos queda la duda de que este anuncio se mantenga. Al fin y al cabo, ya una vez se dijo que serían 10 novelas (no cuento novellas) y su editorial amplió el contrato en 3 más, así que, de aquí a que se llegue a la 13, todavía pueden sorprendernos... ¿O no?