Keito echa de menos a Kôichi y Rei, se da cuenta de que su relación como pareja no va a ninguna parte, así que decide romper con ella antes de que la haga daño también a ella como hizo con Kôichi.
Por primera vez Keito no cuenta con ninguno de sus amigos y el director la hace ver que tiene que ser feliz por si misma antes de poder hacer feliz a nadie más.
Así, Keito decide concentrarse en lo que sabe hacer y acude a la agencia de Nako para pedir que la busquen una audición. Nako la cede una a la que la habían convocado y Keito se lo agradece, sin sospechar que Nako la había rechazado porque sospechaba que era un montaje publicitario y que en realidad ya estaban los papeles dados.
Keito se lanza a la aventura y además se compra su primer teléfono móvil (que no sabe utilizar), con el que informa a Momiji de sus planes. En la audición se da cuenta de que está muy desconectada, ya que todas hablan del protagonista masculino y ella no sabe ni pronunciar sus nombre correctamente. Además, como no acabó la escuela primaria, no es capaz de leer correctamente el guión. Otras candidatas se ofrecen a transcribirle los ideogramas, y sube a la azotea para estudiar su papel sola. Allí hay un miembro del equipo en su descanso que se sorprende al ver como lo prepara, de hecho, hace esfuerzos para no reírse. Keito descubre porqué, cuando, tras su prueba, la acusan de haber cambiado el papel para llamar la atención. El chico de la terraza aclara la situación: las otras chicas se han aprovechado de que no sabía leer correctamente para dinamitar su prueba. Keito considera que ha sido culpa suya y no acepta una segunda prueba, pero se asegurará de que no la vuelva a pasar si consigue otra prueba.
A la salida, descubre 32 llamadas perdidas. Rei se va del país y los 3 amigos se encuentran en el aeropuerto para despedirse de él. A la salida, Momiji consigue que Kôichi se comprometa a buscar unos cuadernillos de escritura para que Keito aprenda a leer y escribir correctamente.
El director de la película a la que se presentó Keito, la llama y le ofrece el papel de la mejor amiga de la protagonista. Sin embargo, el primer día de rodaje es un fracaso. La protagonista es un idol sin experiencia y no sabe interpretar, por lo que empiezan a corregir a Keito. Ella no entiende nada hasta que el protagonista masculino la explica que al no ser buena actriz la protagonista, Rie, no puede haber nadie que actúe mejor, así que tiene que fingir que no es buena actriz. Para su sorpresa, Nako se ofrece a enseñarla, y lo hace, pero advirtiéndola que volverá a traicionarla si se presenta la ocasión.
Keito no solo consigue no destacar al lado de Rie, sino que se ha ganado su confianza y ha comenzado a enseñarla algunos trucos para que mejore su actuación. Tanto, que la gente del equipo empieza a pensar que la verdadera razón del director para contratarla era conseguir precisamente eso.
Momiji no entiende qué ha pasado entre Keito y Kôichi, y la preocupa, ya que no puede verla tanto al haber empezado a trabajar como ayudante de estilista. No sabe que la última vez que se vieron, volvieron a discutir, ya que Keito creyó que el único motivo por el que la ayudaba era porque Rei se lo pidió antes de irse. Sin embargo, no puede evitar querer aclarar las cosas. Pero al verle con su hermana, se echa para atrás. Por su parte, Midori anima a Kôichi a arriesgarse y hacer lo que diga el corazón aunque su racional cabeza no lo comprenda, así que va en busca de Keito.
Por desgracia, allí se encuentra con Chika, que cree estar reviviendo su infancia en la que todo giraba alrededor de la carrera de su hermana, y que en lugar de avisarla de que tiene visita, le dice que ella no quiere volver a verlo y que no regrese jamás.
El tiempo pasa y la carrera de Keito ha despegado. Ha cumplido 19 años, se ha hecho amiga de Nako y sigue viendo a Momiji, que recibe postales de vez en cuando de Rei, que ahora juega en Inglaterra. De quien no sabe nada es de Kôichi, hasta que un día le ve por la calle mirando un cartel de su última película.